Cuarto capítulo del libro de
«Los Secuestros»

Todo, desde los paseos por sus calles llenas de historia, la comida, el alojamiento, las confesiones, hasta las discotecas de otra época.. solo pueden definir este viaje como el más romántico de todos.

Allí donde fuiste tan feliz siempre querras volver. 

Yo volvería a cualquiera de los momentos que hemos vivido juntos, porque todos ellos nos traen hasta hoy, pero siempre existen algunos más especiales, que dejan sensaciones inolvidables.

Aquel lugar, aquel momento en el que la persona de la que estas tan enamorado te reconoce que también lo esta de tí, solo puede convertirse en algo único.

En una antigua posada, frente a la catedral, existe un rinconcito donde hubo tanto amor, pero que es menos del que habrá la próxima vez que volvamos a ir.